spot_imgspot_imgspot_imgspot_img
InicioNoticiasBarcelona, 1992

Barcelona, 1992

Á la ville de…Barcelona. Las palabras del presidente del Comité Olímpico Internacional, Juan Antonio Samaranch, todavía resuenan en los oidos de millones de españoles. La proclamación, el 7 de octubre de 1986, de Barcelona como sede olímpica fue la mejor noticia para un país que comenzaba a recuperarse de 40 años de atraso y falta de libertades.

La imagen del encendido de la antorcha olímpica, realizada a punta de arco por el pebetero Antonio Rebollo, todavía pone la carne de gallina a mucha gente. Fueron días para no olvidar. Del 25 de julio al 9 de agosto de 1992 Barcelona se convirtió en la capital mundial del deporte. Y no defraudó, ya que todavía ahora se consideran los Juegos Olímpicos mejor organizados. Recordar la ceremonia de inauguración, con su representación de la creación del Mar Mediterraneo y el nacimiento de la ciudad de Barcelona, con Montserrat Caballé y Freddy Mercuri cantando a dúo y con el alcalde Pasqual Maragall lanzando un canto en favor de la paz en los territorios de la antigua Yugoslavia, todavía humedece los ojos a millones de españoles.

Y si a nivel de organización no defraudaron, tampoco lo hicieron lo más mínimo a nivel deportivo. En Barcelona se pudo ver, por ejemplo, al mejor equipo de baloncesto de todos los tiempos. Los Estados Unidos de Michael Jordan, Larry Bird, Magic Johnson o Charles Barkley se pasearon durante todo el torneo, realizando un promedio de 117 puntos y ganando la final contra Croacia. Otros grandes nombres de la historia del olimpismo pasaron por Barcelona mostrando al mundo sus grandes cualidades. Sergei Bubka se consagró con su pertiga, Kristina Egerszegi consiguió tres oros en natación y Vitaly Scherbo, un bielorruso de tan solo 20 años, escribió su nombre en oro en los anales del olimpismo haciéndose con seis triunfos en gimnasia, cuatro de ellos conseguidos el mismo día.

El deporte español hizo su particular salto adelante en estas olimpiadas. Las autoridades deportivas se volcaron en años previos mejorando las instalaciones y las becas para deportistas no profesionales. Y la inversión tuvo su recompensa. España batió su récord de medallas en una cita olímpica haciéndose con 22 metales y dejando para la historia de nuestro deporte imágenes inolvidables. La victoria de Fermín Cacho en los últimos metros superando a Morceli, el gol de Kiko en el último minuto que dio el oro a la selección de fútbol, la agónica victoria de Dani Plaza en los 20 kilómetros marcha, el oro del hockey, los tres triunfos en vela, la plata del equipo de waterpolo o la de la pareja Arancha-Conchita. 22 metales, cada uno con su historia de sacrificio detrás.

A nivel político, los Juegos de Barcelona también estuvieron cargados de simbolismo. Hay quien dice que la cita olimpica fue la carta de presentación de la España democrática al mundo. Barcelona demostró estar capacitada para albergar grandes eventos, y la ciudad creció abriéndose al mar y proyectándose a Europa como una de las capitales más modernas. Otro ejemplo de simbolismo lo protagonizó la fondista etíope Derartu Tulú, que fue la primera atleta negra en ganar en unos Juegos. En segundo lugar llegó Elena Meyer, atleta blanca de Sudáfrica. Juntas hicieron un recorrido de la victoria simbolizando la esperanza de una nueva África. Por último, Cuba también volvía a unos Juegos Olímpicos tras años de embargo internacional. Y lo hizo a lo grande, con 15 medallas de oro, siete ellas conseguidas en boxeo.

RELATED ARTICLES

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

spot_imgspot_imgspot_imgspot_img
spot_img
spot_img
spot_img

Ultimas