Por: La Redacción.
Santo Domingo, RD. – El día que llegó la primavera de 1917, en la casa de José de Jesús y Ercilia Dolores celebraron la llegada de un pequeño que luego habría de volverse referente para toda la comunidad.
Alternando entre estudios, visitas familiares y niñez en un caserío que no ayudaba a alcanzar a ver muy lejos, ese niño se fue abriendo paso hasta completar el quinto curso.
Como su escuela solo llegaba hasta ahí, él decidió repetir para ver si enseñaban algo nuevo. Así se convirtió en fundador de sexto, séptimo y octavo en su pueblo.
Después tuvo que irse a Santiago para completar el bachillerato y hasta quiso estudiar en la universidad. Pero las posibilidades de su familia no alcanzaban para tanto.
Desde 1941 se dedicó a la noble labor de enseñar, iniciándose en La Leonor y recorriendo plazas en varios lugares de su pueblo natal, pero también de Montecristi, Dajabón, Valverde y Santiago.
Como parte de su actualización profesional, se formó en Estados Unidos para luego retornar a la labor magisterial. Luego de servir durante casi cuatro décadas al magisterio, fue distinguido como Maestro Consagrado y también recibió el más alto galardón que se otorga en el ramo en el país.
Entre otros cargos públicos, llegó a ser gobernador de nuestra provincia.
Además de ser el padre de una familia honorable, desde las aulas, desde la iglesia, como funcionario público o como simple ciudadano, este hombre se ha convertido en referente y emblema para una mejor sociedad.
Por eso el Abrazo Sabanetero se honra al celebrar y reconocer a Don Bolívar Ferdinand.