Por Ambiorix Popoteur
Corría el año 1977, cuando la vi por primera vez, embelesado como lo hacen los adolescentes cuando se enamoran, en su forma especial de ver y sentir la atracción hacia el sexo opuesto. Ahí estaba ella, conversando con sus amigas del liceo, aquella figura delgada, menuda, esbelta, de hermosa dentadura, cabellera negra que le colgaba hasta el final de la espalda y belleza sin igual.
Con la complicidad de José Saint-Hilaire y de Alejandro Bueno y tomando de pretexto los trabajos que hacíamos en el Movimiento Scout, me acerqué a ella, iniciamos una hermosa relación que se mantuvo por más de tres años, y que lamentablemente no pudo continuar.
Mucho tiempo ha pasado desde entonces y grandes cosas han pasado en nuestras vidas, nada de eso impidió que tuviera con ella una hermosa amistad de la cual guardo bellos recuerdos, por su forma especial de ser y de perdonar.
Hoy ella pasa por una etapa muy difícil. En ese libro de la vida que cada quien tiene que escribir al andar por este mundo, ha aparecido un intruso, el destino, quien como ladrón en la noche, pone sus propias páginas, dolorosas por demás, y le ha tocado a Laura vivir esa enfermedad que le quita la alegría que siempre mostró, que entristece a sus amigos y destroza el alma de sus familiares y de los que la conocimos y la tratamos, la va reduciendo a su merced como quien dispone a su antojo lo que debe suceder.
Laura Hircania Peña Paulino, nacida un 17 de abril, cuando la primavera aún es joven y cual hermosa flor nacida en esta estación fue la alegría de una hermosa familia formada Don Aníbal y Doña Luz, última de sus cinco vástagos, fue siempre una persona muy optimista y realmente positiva, amén de su honestidad en todas las actividades de su vida, cualidades que siempre han sido su norte. Por ello ha cultivado grandes amigos y ha caminado en la la vida con gran valentía, sencillez y honestidad.
He querido plasmar esta tarde, estas ideas que me llegan a la memoria, en homenaje a una persona muy especial para mí, sus amigos, y su familia.
Ambiorix Popoteur
9 Julio 2011
Ambiorix hermoso homenaje para una digna mujer sabanetera. La vida a veces nos juega una mala jugada, pero siempre esta Dios presente para ayudarnos a enfrentar cada situaciion por dificil que sea. Laurita es y sera siempre una mujer luchadora, v
Qué hermoso opúsculo!! Indescriptible homenaje al cariño, al amor límpido, al recuerdo y sobre todo, a la amistad imperecedera. Que Dios proteja y cubra siempre con su divino regazo a Laurita. Gracias hermano, por hacernos sentir cuan hermosa es la