Por Dr. Jorge Ignacio Rodríguez Peña.
Gran regalo en mi vida que Dios me ha dado. Conocer a la persona en físico, saludarlo, abrazarlo, conversar con él, verlo reír, bailar, y estar junto a un grupo de Médicos Cirujanos Estéticos y Reconstructivos, entre los cuales estaban partes de los médicos que asistieron a este paciente.
Trasplante de cara.- Es un injerto de piel que implica reemplazar algunas parte de la cara de un paciente por la cara de un donante fallecido.
El procedimiento consiste en una serie de operaciones que requieren equipos de especialistas que vayan alternándose. Teniendo en cuenta el tipo de tejido, edad, sexo y color de la piel, se quita y se sustituye la cara del paciente – incluida la grasa subyacente, los nervios y los vasos sanguíneos, pero ningún músculo.
La cirugía puede durar 24 a 30 horas, seguida por una estancia en el hospital de dos a tres semanas. Un equipo médico extraería la cara del donante, en muerte cerebral con latido cardiaco, mientras simultáneamente el otro prepararía los vasos sanguíneos y las estructuras que se van a reconstruir del paciente receptor. Tras ello habría que conectar el rostro del donante ocho vasos sanguíneos, cuatro arterias y cuatro venas del receptor, para que la piel reciba la sangre con el oxígeno y los nutrientes que necesita. Esta misma operación sería necesario realizarla con los nervios que controlan los movimientos faciales de la cara y la capacidad sensitiva.
Después del procedimiento es necesaria la toma de medicamentos durante el resto de la vida para suprimir el sistema inmune propio del paciente y para prevenir el rechazo. La cirugía puede dar lugar a complicaciones tal cómo infecciones que harían que la cara se volviera de color negro, y requerirían un segundo trasplante o reconstrucción con injertos en la piel.
El trasplante no da la cara del paciente el aspecto de la cara del donante difunto, porque la musculatura y los huesos subyacentes son diferentes. Los movimientos faciales son provocados por el cerebro, así que la personalidad expresada con la cara recuerda a la del paciente. El donante solo transfiere la piel de la cara, no la forma tridimensional ni la personalidad que expresa.
Estoy muy agradecido del Instituto de Estudios Superiores en Medicina, Universidad del CONDE, México, DF. De la cual soy alumno.
Dr. Jorge Ignacio Rodríguez Peña.
Médico Cirujano, Estudiante de la Maestría de Cirugía
Estética y Reconstructiva, Universidad del CONDE, México, DF.
hola soy dominicana y estoy muy orgullosa de saber que nuestros medicos estan introduciendose en la nueva medicina moderna para ayudar a los paciente que piensan que sus casos no tiene solucion eso es ver una luz en el camino