SANTO DOMINGO.- Rolando Florián Féliz estaba “borracho” cuando recibió los ocho balazos mortales que le hizo la noche del sábado el capitán Lino Oca Jiménez en la cárcel de Najayo, en San Cristóbal, reveló la autopsia practicada al cadáver del narcotraficante barahonero condenado a 20 años.
El fiscal del Distrito Nacional, Alejandro Moscoso Segarra, ofreció la información este miércoles sábado y aclaró que el malogrado interno no había consumido drogas narcóticas ese día.
Dijo que la comisión investigadora ordenó realizar un examen toxicológico para determinar el grado de alcohol en el cuerpo.
Los resultados de la autopsia coinciden con las declaraciones de la joven Yuri Lora, quien el lunes dijo durante una entrevista televisiva que estaban ingiriendo bebidas alcohólicas durante el día y la noche del sábado.
Siguen interrogatorios
En la mañana de este miércoles eran interrogados el coronel Rafael Antonio Peña García, encargado de la seguridad de Najayo Hombres; el teniente coronel César Antonio de los Santos, oficial inspector; el capitán Antonio Faña Lora, coordinador de la Unidad A de Najayo Hombres; un Sargento del que no fue posible obtener el nombre y la esposa de Florián Féliz, Mariela Faña Morales
Legítima defensa
El abogado Freddy Mateo Calderón informó que asumirá la defensa del Capitán que disparó a Florián Féliz, Lino Oca Jiménez, basada en la legítima defensa porque el Código Penal establece que “no habrá crimen ni delito cuando el homicidio, crimen o delito se comete por legítima defensa".
Dijo que el capitán no sólo trató de preservar su vida sino también la del coronel José Pulinario.
Mateo Calderón dijo que Florián Féliz aún sin armas en las manos era un “terror” y "más estando borracho compartiendo con dos mujeres desde las 2:00 de la tarde en la celda, donde probablemente estaría haciendo orgía”, manifestó.
No descartó la posibilidad de un Hábeas Corpus preventivo porque la libertad del capitán está amenazada y criticó que fuera sacado abruptamente del hospital de la Policía en estado de convalecencia, por orden de la Comisión que investiga el caso.
“Al capitán hay que preservarle el derecho a la vida y respetarle el debido proceso”, advirtió.
Mateo Calderón dijo que el Capitán tiene catorce puntos en el maxilar y otra herida en la mano izquierda, por lo que la comisión debe tener consideraciones con él.
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