POR: YADIRA RIVAS – Escritora. Reside en Santiago Rodríguez.
En República Dominicana, Halloween es la oportunidad de muchos fanáticos e ignorantes intelectuales con errata idea de tener la potestad de cancelar una festividad mas antigua que la misma religión católica y cristiana. Unos, celebran mostrando su diminuta imaginación por sádica manera de disfrazarse y otros para criticar.
Mi opinión es que ignorantes son aquellos que no celebran las culturas de otros países sin perder las suyas respetando su procedencia…
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Para los niños, celebrar Halloween contribuye al aprendizaje, ya que tienen muchas formas de aprender y adquirir conocimientos, desarrollar sus habilidades y capacidades mientras se divierten. y los incita a salir de la timidez ya que ese día ellos salen a recolectar golosinas vociferando “truco o trato”. “Trick or treat!
Los niños tendrán que ponerse delante de la puerta, tocar y esperar a que abran. Una vez haya abierto, tendrán que gritar ¡truco o trato!
Los adultos tendrán que escoger una de las opciones, aunque la más común es intercambiar golosinas por trato, y truco, (una canción, un poema o un chiste).
En este esperado día y noche, donde uno tiene la oportunidad de permitir volar la imaginación, Las brujas toman las calles de muchos países este sábado de Halloween o “noche de brujas”.
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Los fantasmas volarán desde las tumbas, los vampiros saldrán de sus sarcófagos llenos de telarañas y los extraterrestres, de sus platillos.
Los disfraces son un elemento fundamental en el mundo de la imaginación y la diversión de los niños. No solo les permiten convertirse en sus personajes favoritos, sino que también les ayudan a desarrollar su creatividad, confianza y habilidades sociales.
En la Biblia, la celebración del Halloween no se encuentra contemplada, pues esta es una fiesta pagana precristiana (es de sus orígenes se remontan a Irlanda hace más de 3.000 años, pues, coincidiendo con el solsticio de otoño, los campesinos celebraban el fin de la temporada bajo la creencia de que durante esa precisa noche, la del 31 de octubre, los espíritus caminaban entre los vivos. (previa a la aparición del cristianismo), celebrada por los celtas en Irlanda.
Ellos creían que en esta época los espíritus (tanto benévolos como malévolos) podían caminar entre los vivos, de ahí la necesidad de disfrazarse para ahuyentar a aquellos que quisieran hacerles daño.
Halloween es una de las celebraciones más lucrativas del mundo. Su carácter festivo actual, alejado de creencias religiosas concretas, le ha otorgado ese carácter universal que le ha permitido traspasar fronteras.
Así es que mis poderosos amigos, ¿por qué no cancelar este día a los niños para alimentar un poco su débil y moribundo ego?