POR: ROBERTO NÚÑEZ.
Yo me pregunto… ¿Será viajera del tiempo?, ¿Será extraterrestre? ¿Vendría de otra galaxia?, ¿Será androide? ¿Es un espécimen, o es un ser humano especial?
Yo vivo y convivo con Dilmarys, prefiero creer que es un ser humano súper especial, y ¿Por qué creo así? Porque ella no se amilana, no descansa, no desmaya cuando se trata de involucrarse por una causa de beneficios múltiples para la sociedad. Su entrega es total, en cuerpo y alma.
Ya imbuida por esa causa, se olvida de su salud y de los suyos. Lucha a brazos partidos, hasta lograr esa meta que va en beneficios de la colectividad.
Es una mujer políticamente contemporánea, pero difiere sobremanera con la mayoría de los políticos contemporáneos. Ahora al momento de luchar por una causa justa y común se involucra con cualquier político, sea este peledeísta, reformista, izquierdista, perremeísta. Siendo por supuesto un involucramiento pasajero. Recuerden que el agua y el aceite no se ligan nunca.
Dilmarys es polifacética. Ama los niños, si fuera por ella les diera el mundo. Quiere al anciano con pasión. Se involucra con los jóvenes, con los adolescentes.
Defiende a la mujer, le duele, le machaca, le aturde esa segregación soslayada en contra de la mujer.
Es una mujer política, pero jamás confundir con demagogia. Lo de esta viajera del tiempo es innato, nació con este don impregnado por todo su cuerpo.
Dios bendiga la galaxia de donde viniste.
El RoN, inspirado no por el alcohol, sino por el Cuello de la botella…diciembre 2018.
