Gobierno promete ventas de productos agropecuarios de manera directa a los colmados
POR: VÍCTOR PERALTA – Comunicador. Reside en Santiago Rodríguez.
Ese es un programa que el gobierno ha anunciado para ser implementado en todo el país. Para suplir a los colmados de productos agrícolas de consumo masivo proveniente de fincas y de cualquier otro predio de producción nacional.
Es buena la intención, pero solo eso, una buena intención. Que a fin de cuentas no tiene ni pie ni cabeza. Y que suena muy bonito en teoría, pero en la práctica resultaría cuesta arriba su implementación.
Se estima que, en la República Dominicana, hay alrededor de 90.000 negocios que se dedican a la venta al detalle, o al por menor (Colmados), que, para suplirlo, de la manera que pretende el gobierno, día tras días, de yuca, de auyama, plátano, guineos, batatas, hortalizas, frutas, sería una tarea extremadamente difícil, por no decir imposible.
Porque la realidad es que los colmados no compran cantidades. No solo porque carecen de recursos económicos en abundancia, y porque sus ventas están dirigidas a una población de bajos ingresos, sino también porque la mayoría de esos productos agropecuarios se pasan, se dañan, y si no tienen salida, en apenas dos o tres días hay que botarlo. Entonces, imagínese usted, los vendedores del gobierno, del Campo Pal Colmado, tendrían que pasar, mínimo dos veces por semana para suplir a esos pequeños negocios.
Y otra cosa. Desde tiempo atrás, muchísimos años atrás, existe una cadena de camioncitos, de bajo cilindraje, y camionetas, que viven de comprarle a los productores agropecuarios, grandes y pequeños, para venderles precisamente a los colmados. También a los mercados y supermercados. Entonces esos que viven de la compra y venta de rubros agropecuarios, con el programa que anuncia el gobierno, del Campo Pal Mercado, ya no tendrán donde ganarse la vida. Incluso, cómo pagar deudas contraída para la ejecución de sus pequeños negocios.
Reitero, no le veo larga vida si el gobierno cumple su palabra y comienza a implementar eso que ha anunciado con bombos y platillos. Duraría menos que una cucaracha en un gallinero. Y no dude usted que, por la inanición o cansancio del Campo Pal Colmado, o por el reemplazo de los tradicionales vendedores, pudiera provocar un desabastecimiento de productos agropecuarios en la cadena de esos pequeños negocios. Y si hay desabastecimiento, más caro se ponen esos productos. Entonces sería peor el remedio que la enfermedad….
