El Lic. José Ángel Moya González, venezolano residente en Santiago Rodríguez, República Dominicana, relata la dura realidad de su país natal bajo un régimen dictatorial que persigue y encarcela a opositores, afectando gravemente la vida cotidiana y la libertad de sus ciudadanos. Cada quien juzga de acuerdo a su ignorancia y conocimiento.
Por: Juan Pablo Bourdierd.
Sabaneta, Santiago Rodríguez, RD. El periódico digital, SabanetaSR.com, ha entrevistado al Lic. José Ángel Moya González, de origen venezolano, quien debió dejar su amado país en busca de una mejor vida para él y sus familiares.
Según José Moya, la perspectiva política y económica en Venezuela es el reflejo de una grave crisis, muy compleja, imposible de analizar en pocas líneas. Para nadie es un secreto que desde hace años Venezuela vive bajo un régimen dictatorial. En los últimos días, tras su fracaso en las elecciones, dicho régimen se ha encargado de encarcelar, secuestrar y torturar a más de 2 mil personas, solo por el simple hecho de votar en contra. Se tienen datos de menores de edad que, solo por tener opiniones en contra de la dictadura o simplemente por salir a tocar una cacerola en protesta, están condenados a 30 años de prisión. También se conoce la cifra de aproximadamente 30 personas muertas. Hay ancianos presos e incluso jóvenes con autismo, precisó.
José Ángel Moya González continúa contando a SabanetaSR.com la situación que viven los venezolanos. Ahora mismo hay puntos de chequeo en las zonas urbanas donde te revisan el teléfono, incluidas las redes sociales, con el fin de determinar si piensas en contra del régimen. Eso es motivo de cárcel, prohibición de canales locales, radio, redes sociales; las casas de las personas opositoras están siendo marcadas y de noche se aplica la famosa “Operación Tun-Tun – en la noche te tocan la puerta, rompen la puerta, te golpean, te meten preso por votar en contra del dictador que es bueno defender desde un país que vive en libertad y con comida”, explicó de forma muy triste.
El poder que ha concentrado el presidente Nicolás Maduro es tan fiel a su régimen, dictadura y maltrato del pueblo venezolano que están encarcelando a personas que gestionan ayudas con insumos para los hospitales. El régimen tiene de su lado fuerzas militares corruptas, células paramilitares armadas hasta los dientes, con orden de matar a la población opositora. Existen células terroristas iraníes y grupos mercenarios rusos al servicio de la dictadura, dijo Moya de forma muy segura.
La situación política, económica y social que se vive en Venezuela ha generado un impacto generalizado en todos nuestros compatriotas; es imposible que un venezolano no se sienta afectado por la muerte a sangre fría, como está sucediendo allá. Tengo familia allá y los suministros de alimentos se han visto gravemente afectados, locales cerrados; es algo que “solo los venezolanos entendemos”, el pensar que estando afuera cada día se nos hace casi imposible volver de visita, saber que nuestras familias y amistades están sufriendo por no conseguir lo básico para vivir, indicó muy melancólico.
La comunidad venezolana está diseminada por toda la geografía nacional; no tengo cifras exactas, pero en Santiago Rodríguez viven muchos venezolanos. Se estima que en el país residen miles; realizando el trabajo que encuentran para sobrevivir como: encargados de hoteles, dueños de restaurantes, conchos, camareras, cafeterías, comida rápida, artistas, etc.
La interacción entre la comunidad venezolana es más importante de lo que parece; vivimos trabajando, por lo que no se nos hace fácil coincidir socialmente, pero cada vez que tenemos la oportunidad de encontrarnos se genera una chispa que “solo el venezolano entiende”. El saber que si estamos fuera de nuestro país es por la actual crisis política, social y económica, la más profunda de la historia moderna de Venezuela, genera cierta empatía automática, explicó Moya.
Aunque ya conocía la República Dominicana porque mi madre es de allí, tuve la oportunidad de conocer el país previo a mi migración; así que culturalmente me adapté bastante rápido. Socialmente fue un reto, como persona soy de carácter tímido. Nunca me he llevado bien con el mal llamado “tigueraje dominicano” y a cualquiera le digo sus cosas directas sin filtros, en otras palabras, no soy, ni puedo ser, moneda de oro. Afortunadamente eso es una minoría. En su mayoría me siento muy bien recibido por la población de esta hermosa provincia llena de cultura, música, buena comida y gente generosa, amable y humilde.
La principal razón para migrar a la RD. fue la enfermedad de mi madre, Milagro de Lourdes González (+), oriunda de la provincia Hermanas Mirabal; no era mi intención, pero las graves crisis que afectaba a mi país me obligaron, bajo un consenso familiar. No teníamos para comprar alimentos y medicamentos; ya teníamos algunos contactos en el país para traerla, reveló.
José Ángel Moya González, de 43 años, es Lic. en Administración Comercial con maestría en Educación Universitaria (Educación para adultos). Llegué al país en agosto de 2017, antes de llegar a Santiago Rodríguez, permanecí por seis meses en Santiago; en ese tiempo hice todo tipo de trabajo, como: camarero en un restaurante de Santiago, sustitución de vacante, venta de calzados e incluso fui digitador en una oficina contable. Finalmente llegué a esta provincia en febrero de 2018 por una situación de trabajo, narró.
Moya narró a SabanetaSR.com que, aunque está mejorando la grave crisis que padecen los venezolanos, Santiago Rodríguez y la República Dominicana también son su patria.